ESTILOS EDUCATIVOS PARENTALES COMO PREDICTOR DEL ÉXITO Y NIVEL DE COMPETICIÓN DEPORTIVO
González-García, H.1; Pelegrín, A.2 y Carballo, J.L.3
1Doctor en Educación y Ciencias del Deporte. Investigador en el Departamento de Psicología de la Salud, Universidad Miguel Hernández de Elche (España) higinio.gonzalez@goumh.es
2Doctora en Psicología. Docente e Investigadora en el Departamento de Psicología de la Salud Universidad Miguel Hernández. Elche (España) apelegrin@umh.es
3Doctor en Psicología. Docente e Investigador en el Departamento de Psicología de la Salud Universidad Miguel Hernández. Elche (España) jcarballo@umh.es
Código UNESCO / UNESCO Code: 580199 Otras Especialidades Educativas (Pedagogía del Deporte) / Other Educational Specialties (Sports Pedagogy).
Clasificación del Consejo de Europa / Council of Europe Classification: 16 Sociología del Deporte / Sociology of Sport.
Recibido 3 de noviembre de 2016 Received November 3, 2016
Aceptado 24 de agosto de 2017 Accepted August 24, 2017
González-García, H.; Pelegrín, A. y Carballo, J.L (2018)Estilos educativos parentales como predictor del éxito y nivel de competición deportivo / Parental Education Styles as a Predictor of Sport Success and Competition Level. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte vol. 18 (71) pp. 589-604.
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/rimcafd2018.71.012
RESUMEN
Los objetivos de este trabajo fueron comprobar cuáles son las diferencias en el nivel de competición deportivo en función de los estilos educativos de los padres, y conocer cuáles son las diferencias en los éxitos deportivos en función de los estilos educativos de los padres. Se administró un Cuestionario Sociodemográfico ad hoc, el Test Autoevaluativo Multifactorial de Adaptación Infantil (TAMAI) y la Escala de Oviedo de Infrecuencia de Respuesta (INF-OV). La muestra se compuso de 502 deportistas españoles. Los resultados mostraron que los deportistas sin éxitos internacionales obtuvieron diferencias significativas y mayores puntuaciones de restricción de la madre. Por otro lado, la educación asistencial próxima al proteccionismo de la madre obtuvo diferencias significativas y mayores puntuaciones en los deportistas que no compiten a nivel internacional. Se concluyó que las madres protectoras no se relacionan con tener hijos que compiten a nivel internacional y las madres restrictivas no se relacionan con tener hijos con éxitos a nivel internacional.
PALABRAS CLAVE: rendimiento deportivo, padres, educación, apoyo familiar
ABSTRACT
The objectives of this research were to check the differences in the level of sport competition depending on parental education styles, and to know what the differences are in parental education styles in terms of sport success. In order to measure the different variables an ad hoc sociodemographic questionnaire, the Multifactor Self-Assessment Test of Child Adjustment (TAMAI) and the Oviedo Scale of Infrequency of Response (INF-OV) were carried out. The sample consisted of 502 Spanish athletes. The results showed that athletes without international success obtained higher scores and significant differences in mother´s restriction. Moreover, the mother’s care education close to protectionism showed significant differences in benefit of athletes who do not compete internationally. It was concluded that protective mothers are not related to having children who compete internationally and restrictive mothers are not related to having children who achieve international success.
KEYWORDS: sport performance, parents, education, family support
INTRODUCCIÓN
El camino hacia el alto nivel deportivo se encuentra lleno de numerosas variables que influyen en el rendimiento del deportista y dificultan conseguir el éxito (Elferink-Gemser, 2013). En este sentido, siguiendo a Elferink-Gemser y Visscher (2012) las variables que inciden en el rendimiento deportivo se dividen en: variables personales y variables ambientales. Dentro de las variables personales destacan: las antropométricas, la genética, las destrezas psicológicas, las destrezas técnico-tácticas y la personalidad (Elferink-Gemser y Visscher, 2012; Menéndez-Santurio y Fernández-Río, 2015; Robazza y Bortoli, 2007). Por otra parte, dentro de las variables ambientales destacan: los padres, los profesores, los entrenadores, los managers, los programas de desarrollo de talentos, la competición, las facilidades en el entrenamiento y las características del país (Jayantha y Ubayachandra, 2015; Medic, Mack, Wilson y Starkes, 2007).
Este trabajo de investigación se centra en la variable ambiental padres, pero desde la perspectiva de los estilos educativos parentales, a diferencia de los estudios anteriores que analizan la influencia de los padres dividiéndola en distintos factores (apoyo, implicación, rol, feedback y orientación motivacional) (Boiché y Sarrazin, 2009; Piéron y Ruiz-Juan, 2013; Wilson y Spink, 2010). En este sentido, siguiendo a Aroca (2010) se entienden los estilos educativos parentales como:
El conjunto de pautas y prácticas de crianza, cuyo objetivo es la socialización y educación de los hijos, donde interactúan rasgos de personalidad, experiencias pasadas y características genéticas, tanto parentales como filiales, que se contextualizan dentro de un sistema intra, meso y macrofamiliar inmerso, a su vez, en un marco transcultural e histórico determinados(p. 84).
Existen numerosas agrupaciones de los estilos educativos, aunque en este trabajo de investigación tan sólo se utilizarán los modelos clásicos de estilos educativos: autoritario, permisivo, y democrático o autoritativo (Baumrind, 1967, 1971). En este caso, los padres autoritarios valoran la obediencia como una virtud, así como la dedicación a las tareas marcadas, la tradición y la preservación del orden. Favorecen las medidas de castigo o de fuerza y están de acuerdo en mantener a los niños en un papel subordinado y en restringir su autonomía (Baumrind, 1996; Belsky, Sligo, Jaffee, Woodward y Silva, 2005; Kaufmann et al., 2000). Por otro lado, los padres permisivos proporcionan gran autonomía al hijo siempre que no se ponga en peligro su supervivencia física. El prototipo de adulto permisivo se comporta de una forma afirmativa, aceptadora y benigna hacia los impulsos y las acciones del niño. Su objetivo fundamental es liberarlo del control y evitar el recurso a la autoridad. No son exigentes en cuanto a madurez y responsabilidad en la ejecución de las tareas (Banham, Hanson, Higgins y Jarrett, 2000). Por otra parte, los padres democráticos intentan dirigir la actividad del niño imponiéndole roles y conductas maduras, pero utilizan el razonamiento y la negociación. Este tipo de padres tienden a dirigir las actividades del niño de forma racional. Parten de una aceptación de los derechos y deberes propios, así como de los derechos y deberes de los niños. Es un estilo que se caracteriza por la comunicación bidireccional y un énfasis compartido entre la responsabilidad social de las acciones y el desarrollo de la autonomía e independencia en el hijo (Banham et al., 2000; García, Pelegrina y Lendínez, 2002; Gfroerer, Kern y Curlette, 2004; Kaufmann et al., 2000; Mansager y Volk, 2004; Warash y Markstrom, 2001; Winsler, Madigan y Aquilino, 2005).
La relación entre la práctica de actividad física orientada a la salud, y los estilos educativos de los padres ha sido probada en diferentes trabajos científicos, pero ninguno de ellos relacionado con la práctica deportiva de alto rendimiento (Borawski, Levers-Landis, Lovergreen y Trapl, 2003; Bumpus, Crouter y McHale, 2001; Kimiecik y Horn, 2012; Kristjansson, James, Allegrante, Sigfusdottir y Helgason, 2010; Pate, Mitchell, Byun y Dowda, 2011; Smetana y Daddis, 2002). Estudios recientes han mostrado que las madres permisivas están asociadas con tener hijos con más alta práctica de actividad física, que los hijos de madres autoritarias (Jago et al., 2011; Hennessy, Hughes, Goldberg, Hyatt y Economos, 2010). Al mismo tiempo, otros trabajos de investigación han relacionado a los hijos de padres permisivos, con más conductas adictivas y menos relacionadas con la salud (Borawski et al., 2003; Bumpus et al., 2001; Kristjansson et al., 2010; Pate et al., 2011; Smetana y Daddis, 2002). Aunque otros estudios mostraban justo lo contrario (Kremers, Brug, De Vries y Engels, 2003; Wake, Nicholson, Hardy y Smith, 2007). Por lo tanto, no está claro qué estilo educativo parental se relaciona con unos mayores niveles de actividad física.
Los estudios que hablan de la influencia del factor del control parental sobre los hijos presentan controversia en sus resultados. De manera que unos autores afirman que un control por parte de los padres sobre lo que hacen sus hijos se asocia con un ocio más saludable y menos sedentario de sus hijos (Carlson et al., 2010; Lin, Lin y Wu, 2009). Otros trabajos evidencian lo contrario, detectando que la vigilancia de los padres ejerce un efecto negativo en el ocio de sus hijos (Piéron y Ruiz-Juan, 2013; Sharp, Caldwell, Graham y Ridenour, 2006).
Los estudios que hablan del apoyo social han encontrado que la influencia positiva y colaborativa de los padres se relaciona con la realización de actividad física por parte de los hijos (Cohen, Gottlieb y Underwood, 2000; Holt y Hoar, 2006; Pugliese y Tinsley, 2007; Wilson y Spink, 2010). La influencia colaborativa se entiende como conductas paternas de facilitación de la práctica deportiva de sus hijos (p.ej., llevarlos a campeonatos, a los entrenamientos, etc), y la influencia positiva se explica como apoyo social, estimulación positiva de los padres y control social positivo. En este sentido, Boiché y Sarrazin (2009) encontraron que los factores que más se relacionan con el mantenimiento de la práctica deportiva, en contraposición al abandono, fueron el apoyo parental y el valor de los padres hacia la práctica de actividad física. En un estudio de revisión, en el que se examina la relación entre los estilos de crianza generales y comportamientos relacionados con el peso del niño, se sugiere que la combinación de exigencia de los padres y la capacidad de dar autonomía a los hijos se asocia con resultados saludables respecto al peso, la ingesta dietética saludable, unos niveles más altos de actividad física y un menor índice de masa corporal (Sleddens, Gerard, Thijs, De Vries y Kremer, 2011).
Por todo lo expuesto anteriormente, el estudio de la influencia de los estilos educativos parentales en el rendimiento deportivo se muestra como algo novedoso que puede ayudar a predecir el rendimiento adulto de los deportistas. Por ello, se establecieron los siguientes objetivos de investigación: comprobar cuáles son las diferencias en el nivel de competición deportivo en función de los estilos educativos de los padres, y conocer cuáles son las diferencias en los éxitos deportivos en función de los estilos educativos de los padres.
MATERIAL Y MÉTODOS
Participantes
La muestra final estuvo compuesta por 502 deportistas. De total de deportistas, 153 son mujeres (30,5%) y 349 son hombres (69,5%) con una edad comprendida entre los 18 años y los 64 años (M=27,76; SD=9,11). De ellos, 282 eran no federados (56,2%), 220 eran federados (43,8%) y 53 eran deportistas profesionales (10,6%). Del total de la muestra, 246 eran deportistas de deportes individuales (67,21%) y 120 deportistas de deportes colectivos (32,79%). Los deportes o actividades con mayor número de participantes son: musculación (N=77; 15,3%), ciclismo (N=40; 8%), running (N=39; 7,8%), tenis de mesa (N=35; 7%) y fútbol (N=34; 6,8%).
Instrumentos
Cuestionario Sociodemográfico. Para evaluar los factores éxitos deportivos y nivel de competición, se creó un cuestionario sociodemográfico de elaboración propia. Los ítems valoraron aspectos relacionados con: variables biológicas del deportista (altura, sexo, edad, etc.); variables laborales y académicas (nivel de estudios, situación laboral, etc.). Del total de 28 ítems, 5 evaluaban variables biológicas, 5 evaluaban variables laborales y académicas y 18 valoraban variables sociodeportivas. La mayoría de las preguntas eran de respuesta cerrada, de las cuales había preguntas tipo likert, dicotómicas y politómicas. En el caso de las preguntas que examinaban los éxitos y el nivel de competición deportivo, se categorizaron de manera dicotómica (Sí/No).
Aquiescencia y participantes deshonestos. La escala de Oviedo de infrecuencia de respuesta (INF-OV, Fonseca-Pedrero et al., 2009), es una medida de autoinforme que está compuesta por 12 ítems que consta de una escala likert con 5 posibilidades de respuesta (1=“Completamente en desacuerdo”; 5=“Completamente de acuerdo”). El objetivo de esta escala es detectar a los participantes que responden de forma aleatoria, pseudoaleatoria o deshonesta. Al realizarse el cuestionario online, esta escala garantiza la fiabilidad de las respuestas de los participantes. Los participantes con más de 3 respuestas incorrectas en esta prueba fueron eliminados de la muestra final. A través de la Escala de Oviedo, en este trabajo se eliminaron 25 participantes que habían respondido de manera deshonesta al cuestionario.
Evaluación de los Estilos Educativos Parentales. Los estilos educativos de los padres se midieron a través de la Escala de Educación Adecuada Padre-Madre, del Test Autoevaluativo Multifactorial de Adaptación infantil -TAMAI- (Hernández, 1998). El TAMAI es un cuestionario que consta de 175 proposiciones. Se trata de una prueba autoevaluativa sobre actitudes y comportamientos respecto a sí mismo (área personal), la relación social, el ámbito escolar y familiar, y así como sobre las relaciones con los hermanos. Como consigna, se dijo a los deportistas que respondieran a los ítems de los estilos educativos parentales, recordando el estilo educativo más frecuente percibido en su infancia. Por lo tanto, las preguntas se realizaron con carácter retrospectivo. Los estudios de fiabilidad, en muestra universitaria y adulta, obtuvieron un coeficiente alfa de cronbach de 0,91 en la realización del test en su totalidad. Dentro del cuestionario TAMAI, la Escala de Educación Adecuada Padre-Madre fue la que se utilizó en este estudio para evaluar las prácticas educativas parentales según el criterio de los hijos. La escala se divide en los siguientes factores, según el baremo escogido para la educación del padre:
– Educación Asistencial-Personalizada. Se caracteriza por un tipo de educación basada en el amor, en el cuidado y desarrollo de la autonomía y libertad del hijo, y en proporcionarle una normativa adecuada.
– Proteccionismo. Se caracteriza por una preocupación y ayuda excesiva sobre los hijos.
– Permisivismo. Se caracteriza por una excesiva concesión en las demandas de los hijos y en reforzar conductas de capricho: “me deja hacer todo lo que yo quiero, llorando o enfadándome, consigo siempre lo que deseo”.
– Restricción. Se caracteriza por un estilo educativo que es lo contrario de la educación personalizada y permisiva.
La escala se divide en los siguientes factores según el baremo escogido para la educación de la madre:
– Educación Asistencial-Próxima al proteccionismo. Se caracteriza por un tipo de educación basada en el amor, el cuidado y se acerca a la protección excesiva de los hijos.
– Educación Personalizada. Se caracteriza por el respeto y valoración de los padres a los hijos como personas.
– Permisivismo. Se caracteriza por una excesiva concesión en las demandas de los hijos y en reforzar conductas de capricho: “me deja hacer todo lo que yo quiero, llorando o enfadándome, consigo siempre lo que deseo”.
– Restricción. Se caracteriza por un estilo educativo que es lo contrario de la educación personalizada y permisiva.
Procedimiento
Se contactó vía online con las federaciones deportivas españolas y físicamente con entrenadores y deportistas. Las federaciones anunciaron en su web las condiciones para participar en el estudio. De esta forma los deportistas interesados contactaban con el investigador principal. Los participantes voluntarios, enviaban un email de participación a los investigadores, y una vez aseguraban su interés en participar, recibían el enlace al cuestionario de investigación. Por otro lado, en el caso de contactar con los deportistas y entrenadores a nivel presencial, los deportistas daban su email a los investigadores para recibir las instrucciones y el cuestionario de investigación en su correo electrónico. En ambos casos, el cuestionario podían realizarlo libremente a través de internet en su tiempo libre. Una vez los participantes accedían al cuestionario, firmaban un consentimiento informado. Posteriormente, comenzaban a completar el cuestionario de investigación a través de “Google Forms”. Una vez finalizado el cuestionario, los datos se alojaban a través de la aplicación “Google Forms”. En la que se guardaron los cuestionarios de investigación en formato electrónico de Excel.
Análisis de Datos
Para el tratamiento estadístico de los datos se utilizó el programa SPSS 19. Para conocer las características de la muestra, se realizaron los estadísticos descriptivos de media, mínimo, máximo, frecuencia, porcentaje y desviación típica. Para conocer las diferencias de medias cuando las variables eran cuantitativas, se utilizó la prueba t de Student para muestras independientes, empleándose un nivel de confianza del 95%. Por otra parte, con la finalidad de estimar el valor predictivo de los estilos educativos sobre el nivel de competición y los éxitos deportivos, se empleó la regresión logística binaria utilizando el método introducir. Para analizar el tamaño de efecto y así conocer la magnitud de las diferencias encontradas en la prueba t de Student, se utilizó la d de Cohen. En este caso, siguiendo a Cohen (1988) se consideraron los resultados del tamaño del efecto de la siguiente forma: 0,20 ≤ d ≤ 0,49 = pequeño; 0,50 ≤ d ≤ 0,80 = moderado; d ≥ 0,80 = gran tamaño del efecto.
RESULTADOS
En primer lugar, con el objetivo de comprobar cuáles son las diferencias en los estilos educativos de los padres en función del nivel de competición, se realizó una prueba t para muestras independientes en la que subdividió a la muestra en la siguiente clasificación binaria: competición a nivel internacional (CNI) y competición otros niveles (CON). Posteriormente, se calculó la d de Cohen de aquellas variables que habían obtenido diferencias significativas.
Tabla 1. Estilos Educativos y Nivel de Competición
Variables de Estilos Educativos |
CNI (N=45) M (SD) |
CON (N=457) M (SD) |
t (p) |
d Cohen |
Educación Asistencial-Próxima al Proteccionismo Madre |
6,40 (1,69) |
6,34 (1,71) |
0,19 (0,84) |
|
Educación Personalizada Madre |
3,33 (,85) |
3,13 (1,20) |
1,07 (0,28) |
|
Permisivismo Madre |
0,20 (0,45) |
0,19 (0,46) |
0,04 (0,96) |
|
Restricción Madre |
0,73 (0,98) |
1,67 (2,23) |
-5,21 (0,001)** |
1,05 |
Educación Asistencial-Personalizada Padre |
6,31 (1,45) |
5,89 (1,85) |
1,78 (0,07) |
|
Proteccionismo Padre |
2,44 (1,63) |
2,48 (1,60) |
-0,16 (0,86) |
|
Permisivismo Padre |
0,20 (0,50) |
0,18 (0,43) |
0,23 (0,81) |
|
Restricción Padre |
1,02 (1,48) |
1,43 (1,97) |
-1,37 (0,16) |
Nota. CNI = Competición a Nivel Internacional; CON = Competición a Otros Niveles.
*p<0,05; **p<0,01.
Como se puede apreciar en la Tabla 1, la Restricción de la madre (p<0,01) obtuvo diferencias significativas y un tamaño del efecto alto en favor de los deportistas que compiten a otros niveles que obtuvieron mayores puntuaciones. El resto de variables no reportaron diferencias estadísticamente significativas.
Finalmente, para conocer el valor predictivo de cada una de las variables estadísticamente significativas en la prueba t, que en este caso fue la restricción de la madre, se realizó una regresión logística binaria utilizando el método introducir. Se empleó el método de introducir para conocer el poder de clasificación de las variables. En la prueba ómnibus se obtuvo una Chi Cuadrado de X2=408,39 (p<0,01). El valor que se obtuvo en la R2 fue de 0,742 y el modelo clasifica correctamente al 91% de los casos. En los resultados se observa que, a más restricción de la madre (OR=0,701; p<0,05), mayor posibilidad de competir a otros niveles distintos del internacional.
Tabla 2. Regresión logística binaria para predecir el valor de la Restricción de la Madre sobre el Nivel de Competición
Variables |
B |
E.T |
Wald |
p |
OR |
I.C. 95% para OR |
|
Inferior |
Superior |
||||||
Restricción Madre |
-0,35 |
0,13 |
6,54 |
0,011 |
0,70 |
0,53 |
0,92 |
En segundo lugar, con el objetivo de comprobar cuáles son las diferencias en los estilos educativos de los padres en función de los éxitos deportivos, se realizó una prueba t para muestras independientes en la que subdividió a la muestra en la siguiente clasificación dicotómica: éxitos internacionales (EI) y resto de deportistas (RD). Para realizar dicha división, se tuvo en cuenta la respuesta a la pregunta del cuestionario “¿Has conseguido éxitos a nivel internacional?” y, en base a su respuesta, se clasificó a los sujetos en el grupo correspondiente. Posteriormente, se calculó la d de Cohen de aquellas variables que habían obtenido diferencias significativas.
Tabla 3. Estilos Educativos y Éxitos Deportivos
Variables de Estilos Educativos |
EI (N=38) M (SD) |
RD (N=464) M (SD) |
t (p) |
d Cohen |
Educación Asistencial-Próxima al Proteccionismo Madre |
5,81 (1,78) |
6,39 (1,70) |
-2,01 (0,044)* |
0,18 |
Educación Personalizada Madre |
3,26 (0,92) |
3,14 (1,19) |
0,59 (0,55) |
|
Permisivismo Madre |
0,15 (0,43) |
0,20 (0,46) |
-0,54 (0,58) |
|
Restricción Madre |
1,26 (2,06) |
1,61 (2,17) |
-0,96 (0,33) |
|
Educación Asistencial-Personalizada Padre |
5,89 (1,79) |
5,93 (1,82) |
-0,12 (0,90) |
|
Proteccionismo Padre |
2,34 (1,71) |
2,49 (1,59) |
-0,56 (0,57) |
|
Permisivismo Padre |
0,26 (0,55) |
0,17 (0,42) |
0,91 (0,36) |
|
Restricción Padre |
1,23 (1,58) |
1,41 (1,96) |
-0,54 (0,58) |
Nota. EI = Éxitos Internacionales; RD = Resto de Deportistas.
*p<0,05.
Como se puede apreciar en la Tabla 3, la Educación Asistencial de la madre, (p<0,05) arrojó diferencias significativas y un tamaño del efecto pequeño. Por otro lado, el resto de variables de estilos educativos no reportaron resultados estadísticamente significativos.
Finalmente, para conocer el valor predictivo de cada una de las variables estadísticamente significativas en la prueba t, que en este caso fue la educación asistencial de la madre, se realizó una regresión logística binaria utilizando el método introducir. En la prueba ómnibus se obtuvo una Chi Cuadrado de X2=426,66 (p<0,001). El valor que se obtuvo en la R2 fue de 0,76 y el modelo clasifica correctamente al 92,4% de los casos. En los resultados se observa que, a más educación asistencial de la madre próxima al proteccionismo (OR=0,76; p<0,001) mayor posibilidad de no tener éxitos a nivel internacional.
Tabla 4. Regresión logística binaria para predecir el valor de la Educación Asistencial de la Madre sobre los Éxitos Deportivos
Variables |
B |
E.T |
Wald |
p |
OR |
I.C. 95% para OR |
|
Inferior |
Superior |
||||||
Educación Asistencial Madre |
-0,26 |
0,08 |
11,37 |
0,001 |
0,76 |
0,65 |
0,89 |
DISCUSIÓN
El primer objetivo de este trabajo de investigación fue conocer cuáles son las diferencias en los éxitos deportivos en función de los estilos educativos de los padres. Los resultados mostraron diferencias significativas en la variable educación asistencial de la madre-próxima al proteccionismo, obteniendo una relación positiva con la ausencia de éxitos internacionales por parte de sus hijos. De manera que unas prácticas educativas que protejan al deportista en lugar de desarrollar su autonomía presentan una relación con menores éxitos deportivos (Messer y Beidel, 1994; Spada et al., 2012). En el ámbito de la educación parental, ha sido probada la relación negativa que muestra el proteccionismo paterno (padre/madre) con una buena socialización adolescente (Buschgens et al., 2010; Goldstein, Davis-Kean y Eccles, 2005; Grolnick, Beiswenger y Price, 2008; Ladd y Pettit, 2002; Mounts, 2008). A su vez, la sobreprotección parental se relaciona con problemas de ansiedad, autoconcepto, malos comportamientos y consumo de drogas (Clarke, Cooper y Creswell, 2013; Goldstein et al., 2005; Grolnick et al., 2008; Kiriakidis, 2006; Ladd y Pettit, 2002; Mounts, 2008; Spada et al., 2012). Por lo tanto, tras los hallazgos de este trabajo, la sobreprotección materna se muestra como desfavorable para alcanzar éxitos deportivos en la edad adulta.
El segundo objetivo fue comprobar cuáles son las diferencias en el nivel de competición deportivo en función de los estilos educativos de los padres. Los resultados mostraron que las madres restrictivas no se relacionaban con tener hijos que compiten a nivel internacional. Estos resultados son novedosos en el campo del rendimiento deportivo; sin embargo, en el ámbito del deporte salud existen estudios que han mostrado que los hijos de madres autoritarias muestran una menor práctica deportiva (Hennessy et al., 2010; Jago et al., 2011). Por otra parte, en el campo de la educación sí que se ha mostrado la relación entre los estilos educativos de los padres y el éxito educativo (Abar, Carter y Winsler, 2009; Chandler, 2006; Kim y Chung, 2003; Turner, Chandler y Heffer, 2009). Aunque en este ámbito existe controversia en los resultados, ya que los diversos estudios no se ponen de acuerdo en establecer qué estilo educativo parental sería necesario para alcanzar el éxito en los resultados académicos. Estos resultados tan dispares, quizás son debidos a la diversidad de clasificaciones de los estilos educativos parentales utilizadas en cada uno de los estudios científicos y/o a las diferencias culturales entre las distintas poblaciones que examinan (Abar et al., 2009; Aunola, Stattin y Nurmi, 2000; Chandler, 2006; Fuentes, García, Gracia y Alarcón, 2015; Kim y Chung, 2003; Terwase et al., 2016; Turner et al., 2009). En cualquier caso, en lo que sí están de acuerdo la mayoría de estudios es en que, para alcanzar un alto rendimiento educativo y deportivo, es necesario el apoyo, el afecto, un control moderado y una buena comunicación (Boiché y Sarrazin, 2009; Cohen et al., 2000; Fuentes et al., 2015; Holt y Hoar, 2006; Pugliese y Tinsley, 2007; Wilson y Spink, 2010). Al contrario, las características de la madre restrictiva se alejan totalmente del apoyo, afecto, control moderado y la buena comunicación. Este tipo de madre se caracteriza por establecer una inadecuada comunicación con los hijos, normas excesivamente perfeccionistas, utilizan los castigos de manera constante y se encuentran en una incesante reafirmación de poder (Baumrind, 1996; Kaufmann et al., 2000). Por su parte, los hijos presentan desajuste emocional, motivación más baja para el deporte, baja autonomía, baja autoconfianza, agresividad y ansiedad competitiva (González-García, Pelegrín y Carballo, 2015). Por lo tanto, los resultados parecen evidenciar que la restricción de la madre no se relaciona con competir a nivel internacional.
Las conclusiones que se han obtenido en el presente trabajo son:
– El nivel de competición deportivo se ve influido por los estilos educativos de los padres. De manera que, el perfil de madre protectora no se relaciona con tener hijos que compitan a nivel internacional.
– Los éxitos deportivos se ven influidos por los estilos educativos. De forma que, un perfil educativo maternal más restrictivo no se relaciona con conseguir éxitos a nivel internacional por parte de sus hijos.
– Como conclusión final, se confirma que los estilos educativos parentales se muestran como variables que pueden predecir el éxito y el nivel de competición deportivo.
Como futuras líneas de trabajo se sugiere ampliar el conocimiento en el ámbito de los estilos educativos de los padres y el rendimiento deportivo, ya que no existe bibliografía anterior a este trabajo. En este sentido, sería interesante replicar este estudio separando los estilos educativos en actitudes parentales. De esta forma, se desglosarían los estilos educativos pudiendo recoger más información de cada una de las actitudes paternas que potencialmente pueden influir en el rendimiento en el deporte.
Las limitaciones principales de este trabajo son:
– El cuestionario empleado para medir la variable de Estilos Educativos Parentales (TAMAI) no se encuentra adaptado para la población mayor de 18 años. Por ello, se realizaron las preguntas del cuestionario aludiendo a la época más representativa de la crianza de los participantes.
– La clasificación empleada para el análisis de los Estilos Educativos Parentales tan sólo tiene en cuenta la influencia de las prácticas parentales sobre los hijos. Existen numerosas teorías que miden los Estilos Educativos Parentales, pero en este trabajo se ha adoptado la clasificación del Test Autoevaluativo Multifactorial de Adaptación infantil (TAMAI) (Hernández, 1998), que está basada en los trabajos de Baumrind (1967, 1970).
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Abar, B., Carter, K. L. y Winsler, A. (2009). The effects of maternal parenting style and religious commitment on self-regulation, academic achievement, and risk behavior among African-American parochial college students. Journal of Adolescence, 32(2), 259-273
2. Aunola, K., Stattin, H. y Nurmi, J. E. (2000). Parenting styles and adolescents achievement strategies. Journal of Adolescence, 23(2), 205-222.
3. Aroca, C. (2010). La violencia filio-parental: una aproximación a sus claves. Valencia, Universitat de Valéncia.
4. Banham, V., Hanson, J., Higgins, A. y Jarrett, M. (2000). Parent-child communication and its perceived effects on the young child’s developing self-concept. Paper presented at the Australian Institute of Family Studies Conference. Sydney, Australia.
5. Baumrind, D. (1967). Child care practices anteceding three patterns of preschool behaviour. Genetic Psychology Monographs, 75(1), 43-88.
6. Baumrind, D. (1970). Socialization and instrumental competence in young children. Young Children, 26(2), 104-119.
7. Baumrind, D. (1971). Current patterns of parental authority. Developmental Psychology Monograpf, 4(1, Pt. 2).
8. Baumrind, D. (1996). The Discipline Controversy Revisted. Family Relations, 4(4), 405-414.
9. Belsky, J., Sligo, J., Jaffee, S. R., Woodward, L. y Silva, P. A. (2005). Intergenerational transmission of warm-sensitive-stimulating parenting: a prospective study of mothers and fathers of 3 years olds. Child Development, 76(2), 384-396.
10. Boiché, J. S. C. y Sarrazin, P. G. (2009). Proximal and distal factors associated with dropout versus maintained participation in organized sport. Journal of Sports Science and Medicine, 8(1), 9-16.
11. Borawski, E. A., Levers-Landis, C. E., Lovergreen, L. D. y Trapl, E. S. (2003). Parenting monitoring, negotiated unsupervised time, and parental trust: the role of perceived parenting practices in adolescent health risk behaviors. Journal of Adolescent Health, 33(2), 60-70. Doi: http://dx.doi.org/10.1016/S1054139X(03)00100-9
12. Bumpus, M. F., Crouter, A. C. y McHale, S. M. (2001). Parental autonomy granting during adolescence: exploring gender differences in context. Developmental Psychology, 37(2), 163-173. Doi: http://dx.doi.org/10.1037/00121649.37.2.163.
13. Buschgens, C., Van Aken, M., Swinkels, S., Ormel, J., Verhulst, F. y Buitelaar, J. (2010). Externalizing behaviors in preadolescents: familial risk to externalizing behaviors and perceived parenting styles. European Child and Adolescence Psychiatry, 19(7), 567-575. doi: 10.1007/s00787-009-0086-8.
14. Carlson, S. A., Fulton, J. E., Lee, S. M., Foley, J. T., Heitzler, C. y Huhman, M. (2010). Influence of Limit-Setting and Participation in Physical Activity on Youth Screen Time. Pediatrics, 126(1), 89-96.
15. Chandler, M. (2006). The influence of parenting style and ethnicity on academic selfefficacy and academic performance. Tesis doctoral no publicada, Texas A y M University. Extraído de http://hdl.handle.net/1969.1/3717.
16. Clarke, K., Cooper, P. y Creswell, C. (2013). The Parental Overprotection Scale: Associations with child and parental anxiety. Journal of Affect Disord, 151(2), 618–624. Doi: 10.1016/j.jad.2013.07.007
17. Cohen, J. (1988). Statistical Power Analysis for the Behavioral Sciences. New York: Academic Press.
18. Cohen, S., Gottlieb, B. H. y Underwood, L. G. (2000). Social relationships and health. En S. Cohen, L. G. Underwood, y B. H. Gottlieb (Eds.), Social support measurement and intervention: A guide for health and social scientists (pp. 325). New York: Oxford University Press.
19. Elferink-Gemser, M. T. (2013). Olympia exists Pushing boundaries for talented athletes. Nijmegen: Colophon
20. Elferink-Gemser M. T. y Visscher, C. (2012). Who are the superstars of tomorrow? Talent development in Dutch Soccer. En J. Baker, J. Schorer y S. Cobley (Eds.), Talent identification and development in sport. International perspectives (pp. 95-105). London: Routledge.
21. Fuentes, M. C., García, F., Gracia, E. y Alarcón, A. (2015). Los estilos parentales de socialización y el ajuste psicológico. Un estudio con adolescentes españoles. Revista de Psicodidáctica, 20(1), 117-138.
22. García, M. C. C., Pelegrina, S. y Lendínez, J. (2002). Los estilos educativos de los padres y la competencia psicosocial de los adolescentes. Anuario de Psicología, 33(1), 79-95.
23. Gfroerer, K. P., Kern, R. M. y Curlette, W. L. (2004). Research support for individual psychology’s parenting model. Journal of Individual Psychology, 60(4), 379-388.
24. Goldstein, S. E., Davis-Kean, P. E. y Eccles, J. S. (2005). Parents, peers, and problem behavior: A longitudinal investigation of the impact of relationship perceptions and characteristics on the development of adolescent problem behavior. Developmental Psychology, 41(2), 401-413. doi: 10.1037/0012-1649.41.2.401.
25. González-García, H., Pelegrín, A. y Carballo, J. L. (2015). Educación de los Padres y Tenis de Mesa: Revisión Teórica y Orientaciones Prácticas. Journal Kronos, 14(1). Extraído de http://g-se.com/es/journals/kronos/articulos/educacion-delos-padres-y-tenis-de-mesa-revision-teorica-y-orientaciones-practicas-1809.
26. Grolnick, W. S., Beiswenger, K. L. y Price, C. E. (2008). Stepping up without overstepping: Disentangling parenting dimensions and their implications for adolescent adjustment. En M. Kerr, H. Stattin y R. C. M. E. Engels (Eds.), What can parents do? New insights into the role of parents in adolescent problem behaviors (pp. 213-237). Londres, Inglaterra: John Wiley y Sons.
27. Hennessy, E., Hughes, S. O., Goldberg, J. P., Hyatt, R. R. y Economos, C. D. (2010). Parent–child interactions and objectively measured child physical activity: a cross-sectional study. International journal of behavioural nutrition and physical activity, 7(71), 14.
28. Hernández, P. (1998). Test Autoevaluativo Multifactorial de Adaptación Infantil. Madrid: TEA Ediciones
29. Holt, N. L. y Hoar, S. D. (2006). The multidimensional construct of social support. En S. Hanton y S. D. Mellalieu (Eds.), Literature reviews in sport psychology (pp. 199-225). New York: Nova Science Publishers.
30. Jago, R., Davison, K. K., Brockman, R., Page, A. S., Thompson, J. L. y Fox, K. R. (2011). Parenting styles, parenting practices, and physical activity in 10 to 11 year olds. Preventive Medicine, 52(1), 44–47.
31. Jayantha, K. y Ubayachandra, E. G. (2015). Going for Gold Medals: Factors affecting Olympic Performance. International Journal of Scientific and Research Publications, 5(6), 2250-3153.
32. Kaufmann, D., Gesten, E., Santa Lucia, R. C., Salcedo, O., Rendina-Gobioff, G., y Gadd, R. (2000). The relationship between parenting style and children’s adjustment: the parent’s perspective. Journal of Child and family studies, 8(2), 231-245.
33. Kim, H. y Chung, R. H. G. (2003). Relationship of recalled parenting style to selfperception in Korean American college students. Journal of Genetic Psychology, 164(4), 481–492.
34. Kimiecik, J. C. y Horn, T. S. (2012). Examining the relationship between family context and children’s physical activity beliefs: The role of parenting style. Psychology of Sport and Exercise, 13(1), 10-18.
35. Kremers, S. P., Brug, J., De Vries, H. y Engels, R. C. (2003). Parenting style and adolescent fruit consumption. Appetite, 41(1), 43–50.
36. Kiriakidis, S. P. (2006). Perceived parental care and supervision: Relations with cognitive representations of future offending in a sample of young offenders. International Journal of Offender Therapy and Comparative Criminology, 50(2), 187-203. doi: 10.1177/0306624X05278517.
37. Kristjansson, A. L., James, J. E., Allegrante, J. P., Sigfusdottir, I. D. y Helgason, A. R. (2010). Adolescent substance use, parental monitoring, and leisure-time activities: 12-year outcomes of primary prevention in Iceland. Preventive Medicine, 51(2), 168-171. Doi: http://dx.doi.org/10.1016/j.ypmed.2010.05.001.
38. Ladd, G. W. y Pettit, G. S. (2002). Parenting and the development of children’s peer relationships. En M. H. Bornstein (Ed.), Handbook of parenting: Practical issues in parenting (pp. 269-309). Nueva Jersey, EE.UU: Lawrence Erlbaum Associates.
39. Lin, C. H., Lin, S. L. y Wu, C. P. (2009). The effects of parental monitoring and leisure boredom on adolescents’ Internet addiction. Adolescence, 44(176), 993-1004.
40. Mansager, E. y Volk, R. (2004). Parent’s prism: three dimensions of effective parenting. Journal of Individual Psychology, 60(3), 277-293.
41. Medic, N., Mack, D. E., Wilson, P. M. y Starkes, J. L. (2007). The effects of athletic scholarships on motivation in sport. Journal of Sport Behavior, 30(3), 292-306.
42. Menéndez-Santurio, J. I. y Fernández-Río, J. (2015). Niveles de ira en practicantes de boxeo y kickboxing: diferencias en función de la disciplina y el nivel deportivo. Cuadernos de Psicología del deporte, 15(3), 75-86.
43. Messer, S. C. y Beidel, D. C. (1994). Psychosocial correlates of childhood anxiety disorders. Journal of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry, 33(7),975-983.
44. Mounts, N. S. (2008). Linkages between parenting and peer relationships: A model for parental management of adolescents’ peer relationships. En M. Kerr, H. Stattin y R. C. M. E. Engels (Eds.), What can parents do? New insights into the role of parents in adolescent problem behaviors (pp. 163-189). Londres, Inglaterra: John Wiley y Sons.
45. Pate, R. R., Mitchell, J. A., Byun, W. y Dowda, M. (2011). Sedentary behaviour in youth. British Journal of Sport Medicine, 45(11), 906-913. Doi: http://dx.doi.org/10.1136/bjsports-2011-090192.
46. Piéron, M. y Ruiz-Juan, F. (2013). Influencia del ámbito familiar e iguales en los hábitos físico-deportivos de los jóvenes. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, 13(51), 525-549.
47. Pugliese, J. y Tinsley, B. (2007). Parental socialization of child and adolescent physical activity: a meta-analysis. Journal of Family Psychology, 21(3), 331-343.
48. Robazza, C. y Bortoli, L. (2007). Perceived impact of anger and anxiety on sporting performance in rugby players. Psychology of Sport and Exercise, 8(6), 875-896.
49. Sharp, E. H., Caldwell, L. L., Graham, J. W. y Ridenour, T. A. (2006). Individual motivation and parental influence on adolescents’ experiences of interest in free time: a longitudinal examination. Journal of Youth and Adolescence, 35(3), 359-372. Doi: http://dx.doi.org/10.1007/s10964-006-9045-6.
50. Sleddens, E. F. C., Gerards, S. M. P. L., Thijs, C., de Vries, N. K. y Kremers, S. P. J. (2011). General parenting, childhood overweight and obesity-inducing behaviors. International Journal of Pediatric Obesity, 6(1), 12–27. Doi:10.3109/17477166.2011.566339.
51. Smetana, J. G. y Daddis, C. (2002). Domain-specific antecedents of parental psychological control and monitoring: the role of parenting beliefs and practices. Child Development, 73(2), 563-580. Doi: http://dx.doi.org/10.1111/1467-8624.00424.
52. Spada, M., Caselli, G., Manfredi, C., Rebecchi, D., Rovetto, F., Ruggiero, G. M. … Sassaroli, S. (2012). Parental Overprotection and Metacognitions as predictors of Worry and Anxiety. Behavioural and Cognitive Psychotherapy, 40, 287-296.
53. Terwase, J. M., Ibaishwa, R. L. y Enemari, J. (2016). Parenting Styles and Gender as Predictors of Social Intelligence among Adolescents in Idoma Land. Mediterranean Journal of Social Sciences, 7(1), 181-187. Doi:10.5901/mjss.2016.v7n1s1p181.
54. Turner, E. A., Chandler, M. y Heffer, R. W. (2009). Influence of parenting styles, achievement motivation, and self-efficacy on academic performance in college students. Journal of College Student Development, 50(3), 337-346.
55. Wake, M., Nicholson, J. M., Hardy, P. y Smith, K. (2007). Preschooler obesity and parenting styles of mothers and fathers: Australian national population study. Pediatrics, 120(6), 1520–1527.
56. Warash, B. G. y Markstrom, C. A. (2001). Parental perceptions of parenting styles in relation to academic self-esteem of preschoolers. Education, 121(3), 485-493.
57. Wilson, K. S. y Spink, K. S. (2010). Perceived parental social control following a recalled physical activity lapse: impact on adolescents’ reported behavior. Psychology of Sport and Exercise, 11(6), 602-608. doi:10.1016/j.psychsport.2010.06.012.
58. Winsler, A., Madigan, A. L. y Aquilino, S. A. (2005). Correspondence between maternal and paternal parenting styles in early childhood. Early Childhood Research Quarterly, 20(1), 1-12.
Número de citas totales/ Totalreferences: 60 (100%)
Número de citas propias de la revista/Journal’sownreferences: 1 (1,6%)